LA ORGANIZACIÓN VIRTUAL
En el corazón de la organización virtual existe una organización central que desempeña algunas funciones críticas para las cuales la organización está particularmente bien adaptada. Las funciones externas a esta área central de competencia pueden llevarse a cabo a través de empleados temporales o a contrata, o pueden delegarse a otras empresas con las que la organización central ha formado alianzas o vínculos de afiliación. La organización central mantiene estas relaciones únicamente mientras sean productivas y beneficiosas. En cierto modo, podemos considerar la organización virtual como una extensión de las estrategias interorganizativas de control externo. Otras formas de referirse a este tipo de organización son, la organización en trébol u organizaciones en red.
Como desventajas tiene que la organización central posee un menor control que una organización convencional. El control de las empresas proveedoras y de los trabajadores temporales o a contrata externos a la organización central puede llegar a ser más complicado de lo que sería si estas funciones se llevaran a cabo dentro de los límites de la empresa y con trabajadores fijos. Por otro lado, algunos críticos han afirmado que estas nuevas organizaciones son, en efecto, organizaciones huecas o vacías. Estas empresas concentran sus esfuerzos en trabajos técnicos altamente especializados y profesionales. El trabajo de producción se realiza a menudo en otro lugar, especialmente en países en vías de desarrollo. Existe el peligro de que las organizaciones que no producen pierdan su poder de influencia económico y sus habilidades en favor de las empresas fabricantes.
LA ORGANIZACIÓN FEDERAL
Según Charles Handy, una organización federal es, en cierto modo, una extensión del diseño divisional basado en el producto. Se caracteriza por una pequeña organización central que proporciona liderazgo y planificación global, así como un número de subsidiarias sueltamente afiliados. Aunque la organización central ejerce un estrecho control financiero en sus subsidiarias, éstas poseen gran libertad y flexibilidad para dirigir el negocio.
Existen dos versiones específicamente asiáticas de la organización federal: el keiretsu japonés y el chebol coreano. Aunque tanto la naturaleza como la propiedad de la empresa son distintas en cada uno de estos diseños, el keiretsu y el chebol son similares en que implican a un gran número de organizaciones afiliadas que se hallan unidas de forma bastante flexible mediante una propiedad cruzada.